En este post os voy a hablar sobre las propiedades de este increíble mineral capaz de mantener la negatividad a raya.
Desde la antigüedad, los hombres se vieron atraídos por cierta roca que tenía propiedades extraordinarias: la turmalina. Se cree que su nombre proviene de la antigua Ceylán – República de Sri Lanka – donde sus pobladores denominaban touramalli a un conjunto de minerales que presentaban como característica la variedad de colores. Otros consideran que su nombre proviene de un vocablo cingalés, turamali, que significa “atrae cenizas”. La turmalina es el único mineral capaz de generar electricidad. Cuando es sometida a alguna presión, por ejemplo, el calor, los iones distribuidos en todo el mineral se ordenan en los polos, en un extremo los positivos y en el otro los negativos.
Existen turmalinas de prácticamente todos los colores, pero la más poderosa es la turmalina negra. La característica más conocida de este mineral radica en su capacidad para expulsar las energías negativas hacia la tierra de manera que descarga y libera a su portador. Mantiene el mal humor, la ira, las depresiones o las ansiedades alejadas de nosotros.
Las energías negativas llegan de diferentes maneras a nuestras vidas; pueden ser adquiridas en la calle o en las actitudes personales que adoptamos. Pero también pueden ser emitidas por otras personas como, por ejemplo, la envidia, celos, resentimientos o cualquier mala intención que pueda perjudicarnos. Este mineral se utiliza para que las energías negativas que se encuentren en un lugar, en el interior de uno mismo o que proyecta una persona sobre nosotros, sea transmutada en energía positiva y así evitar que afecte a nuestro entorno y a nuestro estado anímico.
Una excelente manera de utilizar la turmalina negra es llevándola en todo momento, y si crees oportuno, alejada de la vista de otros para que no absorba energías negativas ajenas. Puedes llevarla en una colgante, una pulsera o en una pequeña bolsita dentro de algún bolsillo o cartera. Llevarla junto a un cuarzo también es una muy buena idea. Si trabajas en oficinas o estás en contacto con aparatos eléctricos, tienes que saber que esta “piedra preciosa negra” es capaz de protegerte de sus radiaciones electromagnéticas.
La Turmalina es necesario limpiarla, y no se trata de suciedad, sino de las energías negativas que ha ido absorbiendo para proteger a su portador. Hay que colocarla en agua con sal, luego lavarla muy bien y exponerla al sol para que su energía sea recargada, o bien, colocarla junto con un cuarzo.
Pues bien, espero que esta información os sea útil. Puedes encontrar tu Turmalina siguiendo el enlace bisuteriafosilesyminerales.com, y recuerda que la energía de las piedras te ayuda, pero el verdadero poder está en tu voluntad.
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